El gobierno de Bolivia confirmó hoy que este año no se pagará el segundo aguinaldo navideño, después de que se verificara que el crecimiento del PIB entre junio de 2015 y julio de 2016 fue de 4,43 %, menor al 4,5 % fijado por norma como necesario para que se haga efectivo ese beneficio.
El ministro boliviano de Economía, Luis Arce, dijo en una rueda de prensa que la cifra del crecimiento informada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) "no da la viabilidad correspondiente" al pago de la bonificación, que fue instituida en 2013.
El decreto que regula este pago navideño extra establece que se otorgará a los trabajadores si es que el producto interior bruto (PIB) crece un 4,5 %, lo que ocurrió en 2013, 2014 y 2015.
El cálculo para el pago del beneficio se hace entre junio de un año y julio del siguiente.
Desde que fue creado hace tres años, el pago del doble aguinaldo navideño en Bolivia ha sido criticado por los empresarios del país argumentando que provocó despidos y cierres de pequeñas empresas.
Una de las observaciones es que el beneficio se ha aplicado por decreto con el promedio del crecimiento general, pero sin considerar que había sectores con escaso desarrollo o con cifras rojas.
En cambio, la Central Obrera Boliviana (COB) y los sindicatos siempre lo han defendido porque el pago extra es considerado como parte de una política para la redistribución de la riqueza, aunque solo beneficia a una minoría de trabajadores del área formal.
En Bolivia, un 70 % desempeña sus actividades en la informalidad.
El presidente del privado Instituto Boliviano de Comercio Exterior, Antonio Rocha, dijo a la agencia estatal ABI que la decisión sobre el no pago del doble aguinaldo es "sensata, acorde a la realidad que viven gran parte de los sector productivos del país, que sustentan la mayoría del empleo formal".
A principios de año, el Gobierno daba por seguro que en 2016 también se pagaría el beneficio, pero la baja del precio del gas que se exporta influyó en una desacelaración del crecimiento de Bolivia.
Según el reporte difundido hoy por el INE, diez actividades económicas registraron cifras de crecimiento, pero el sector de los hidrocarburos, que proporciona al Estado sus mayores recursos, y el de la minería cerraron hasta junio con variaciones negativas.
La extracción de petróleo y gas tuvo una caída del 2,69 % y la explotación de minerales, bajó en un 0,03 %.
En cambio, crecieron los sectores de la administración pública en 8,84 %, establecimientos financieros, 7,13 %; construcción, 6,01 %, los servicios de electricidad, gas y agua, en 5,56 %; el transporte y almacenamiento, en 5,49 %, y la industria manufacturera, en 4,91 %.
Los que menos crecieron son otros servicios (hotelería, restaurantes, servicios comunales, personales, domésticos), un 4,18 %; comercio, 4,11 %; comunicaciones, 4,05 %, y agropecuaria, en 3,16 %.
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