Iban 8 minutos del segundo tiempo cuando ocurrió el gravísimo error de Wilfredo Caballero, arquero de la Selección Argentina, que derivó en el primer gol del partido a favor de Croacia. Gabriel Mercado le dio la pelota al guardameta argentino y este -insólitamente- falló en la devolución (que resultó muy corta) y le dejó la pelota servida al número 18 croata, Ante Rebic, quien la empaló de volea y salió gritando el 1 a 0.
Mientras Willy, y todo el banco de la Selección, se agarraron la cabeza por tamaño error, Rebic salió disparado hacia un costado para festejar el gol haciendo el clásico Topo Gigio.
Al instante, con un Sampaoli abatido, los suplentes argentinos empezaron a gritar desde el banco para alentar a sus compañeros en la cancha. El DT mandó a la cancha a Higuaín, primero, y a Pavón, después, en lugar de Agüero y Salvio.
Las consecuencias de este error que le cuesta caro a la Selección tendrá como responsable directo al arquero del Chelsea inglés. Pero también alcanzar al zurdo de Casilda por su obstinada preferencia por arqueros que "supuestamente" saben jugar con los pies (como Nahuel Guzmán, también) en detrimento de otros que demostraron mayor seguridad, como Franco Armani.
El arquero de River fue el preferido de los hinchas y de la mayoría de los periodistas. Sampaoli, tras descartar a Chiquito Romero por su lesión, se inclinó por darle la titularidad a Caballero en lugar de Armani, como era opinión mayoritaria de la "cátedra" futbolística. No fue el único arquero que cometió errores en este Mundial el 1 de Argentina. Además de Caballero, David De Gea (compañero de Romero en Manchester United) se mandó un par de macanas en España 3-Portugal 3 que le impidieron al equipo de Fernando Hierro llevarse los tres puntos.
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