En una reacción enérgica a la reciente expulsión de la embajadora de Uruguay en Venezuela, el gobierno uruguayo, a través del Ministerio de Relaciones Exteriores, emitió un comunicado oficial condenando la medida tomada por el régimen de Nicolás Maduro. Según el comunicado, esta acción ha sido calificada como "una medida injustificada y desproporcionada" que no solo afecta a los funcionarios diplomáticos, sino también a miles de ciudadanos venezolanos residentes en Uruguay.
El comunicado oficial expresa el profundo lamento del gobierno uruguayo por la decisión del régimen venezolano de exigir el retiro de los funcionarios diplomáticos de Uruguay, junto con los de otros seis países acreditados en Venezuela. Asimismo, destaca que el retiro de la representación venezolana en Uruguay "deja en situación de desprotección y corta el vínculo con su país a los miles de venezolanos que han tenido que abandonar su tierra en los últimos años, y que encontraron en Uruguay su lugar de residencia permanente".
La expulsión de la embajadora uruguaya y del personal diplomático se produce en el contexto de una creciente tensión internacional tras las elecciones del pasado domingo en Venezuela. Dichas elecciones, que culminaron con la declaración de victoria del presidente Nicolás Maduro, han sido objeto de críticas a nivel mundial debido a las "irregularidades y la falta de transparencia" observadas en el proceso electoral, según indica el comunicado de Uruguay.
En respuesta a estas preocupaciones, el gobierno uruguayo ha reafirmado su compromiso de continuar exigiendo en los foros internacionales "un escrutinio transparente, auditado y arbitrado internacionalmente, que refleje de forma fehaciente la voluntad del pueblo venezolano". La cancillería uruguaya subraya que el pueblo venezolano "se expresó de manera masiva y pacífica en las urnas para elegir democráticamente a sus autoridades".
La Organización de Estados Americanos (OEA), a través de un comunicado emitido por la oficina de su secretario general, el uruguayo Luis Almagro, también ha condenado el proceso electoral en Venezuela. La OEA denunció "la manipulación más aberrante" llevada a cabo por el régimen venezolano, acusándolo de distorsionar completamente el resultado electoral mediante un esquema represivo.
El gobierno uruguayo ha percibido una "hostilidad muy grande" por parte de Nicolás Maduro al tomar la decisión de expulsar a la embajadora uruguaya. No obstante, Uruguay ha manifestado su intención de seguir "presionando" en los ámbitos internacionales para que se respeten los derechos democráticos en Venezuela.
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